Sumar promoverá un gran acuerdo de Estado por el medio rural con la compra pública de sus productos o el impulso del veterinario municipal

Sumar promoverá un gran acuerdo de Estado por un medio rural vivo, similar al Pacto de Toledo, dentro del objetivo de favorecer una transición energética justa a través de medidas como ayudas, beneficios fiscales, bonificaciones para las actividades económicas que se desarrollen en esos entornos, además de una negoaciación de la nueva PAC que tenga más en cuenta el territorio y las explotaciones familiares.
Son algunas de las medidas para el medio rural o el sector agroalimentario que plantea Sumar y que serán compartidas en un acto de escucha en Cabezón de la Sal la candidatura de Sumar, la plataforma creada por la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.
Dentro de su compromiso de ser “la voz de los problemas del día a día” y “la voz de Cantabria en Madrid, Carmen Martín, candidata al Congreso, enumera otras medidas como la ampliación de los servicios públicos o la creación de un banco público de tierra, la cesión de suelo rústico que también tiene la SAREB o la restricción a que las tierras las compren inversores no comunitarias. “Tenemos que cuidar de quienes mantienen nuestros pueblos y nos alimentan y no dejarles en manos del mercado, las grandes cadenas alimentarias o los intereses meramente turísticos y urbanísticos”, aseveran desde Sumar.
Las ayudas se extienden a la compra pública de estos productos del medio rural en colegios, hospitales o residencias de mayores, y a una vigilancia de los precios de la cadena alimentaria, como continuación de la Ley de la Cadena Alimentaria aprobada por el Gobierno central esta legislatura, que prohibía la venta a pérdidas, e incluso un Defensor de la Cadena Alimentaria.
Además, se extenderá la figura del veterinario municipal en los Ayuntamientos de más de cinco mil habitantes y en las mancomunidades de municipios más pequeños, reconociendo las clínicas veterinarias como centros sanitarios y reduciendo al 10% el IVA de los servicios veterinarios.
Y se derogará la Ley de Protección Cultural de la Tauromaquia, prohibiendo la participación de menores en espectáculos crueles con animales o supresión de la financiación pública de los espectáculos taurinos con muerte del animal, junto a más planes contra el maltrato con dotación presupuestaria, más apoyo a entidades de defensa de los derechos animales y adaptación de los zoológicos a planes de conservación.