La Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad convocó, el pasado mes de octubre, subvenciones destinadas a las personas beneficiarias del régimen de protección temporal afectadas por el conflicto en Ucrania que carecieran de recursos económicos suficientes, y se encontrasen empadronadas en Cantabria.
Estas subvenciones vienen a responder a la necesidad al proporcionar apoyo a aquellas personas o familias con dificultades económicas para cubrir necesidades básicas de alojamiento, manutención, adquisición de productos sanitarios o de higiene u otros básicos para la vida diaria.
El importe de la subvención alcanza los 400 euros al mes por persona mayor de edad, más 100 euros al mes por cada menor de edad que tenga a su cargo, siendo la duración mínima de la subvención de una mensualidad y la máxima de seis meses. Con esta iniciativa la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad ha pretendido llegar a los desplazados por la guerra de Ucrania, residentes en Cantabria, que no pudieron beneficiarse en anteriores convocatorias de ayudas y que han mantenido su residencia en la comunidad en el último año.
En total han sido 32 las solicitudes presentadas, de las cuales 28 accederán a la subvención. En su mayoría las beneficiarias son mujeres, un total de 23, por solo 5 hombres. Destacar que también se verán beneficiados 17 menores, con lo que el total de beneficiarios alcanza las 45 personas.
El importe total de la ayuda supera los 58.000 euros. Con estos datos el Gobierno de Cantabria habrá apoyado, en este año 2023, a un total de 276 ciudadanos ucranianos desplazados a Cantabria por el conflicto bélico, 92 de ellos menores.
La guerra de Ucrania ha provocado el desplazamiento de grandes flujos de personas residentes en este país a los países del entorno europeo. En el caso de España se estima que, desde el inicio del conflicto, han llegado más de 100.000 personas. De todas ellas solo una pequeña parte ha sido atendida mediante el dispositivo de emergencia o en el sistema de acogida de protección internacional.
En la mayor parte de los casos las personas desplazadas han recurrido a contactos personales en España y en muchos casos pueden encontrarse en situación de vulnerabilidad.
